24 de marzo de 2015 – 14 de junio de 2015
La exposición organizada por la Obra Social «la Caixa» está formada por 40 obras, todas ellas pertenecientes a la Colección «la Caixa» de Obra Gráfica. Reúne algunas de las pruebas de impresión de una serie de litografías una de las múltiples técnicas creativas que Joan Miró cultivó- realizadas en las décadas de los años 70 y 80. Estas obras, intervenidas a mano por el artista, constituyen un legado extraordinario para entender el proceso de trabajo de uno de los artistas plásticos más importantes del siglo pasado. La exposición reúne, como muestra de la variada actividad de Miró en este campo abierto a un público más amplio, proyectos para libros, cubiertas de catálogos, y diversos carteles. La participación de Miró en la realización de libros constituye uno de los aspectos más fecundos y personales de su producción litográfica, especialmente en los años setenta y ochenta, en los que trabajó con una gran cantidad de escritores.
Estas litografías de Joan Miró pertenecen a los últimos años de la vida del artista, un período de síntesis y meditación. Estas obras litográficas trasmiten a su vez otras de las características comunes a toda su producción, como son la impresión de libertad e inmediatez. La litografía, con las posibilidades de color intrínsecas a ésta técnica que descubrió en 1948, se convirtieron para Miró en uno de sus medios de expresión preferidos, por la espontaneidad y la capacidad de improvisación que le permitía. Entre las obras que se muestran en Joan Miró, litógrafo se pueden encontrar dos tipos de trabajos preliminares: pruebas de estado y bon à tirer. Las pruebas de estado son las impresiones previas de las litografías en las que el artista va examinando el progreso de su obra en distintas etapas. Miró coloreó a mano, con gouache, muchas de estas pruebas, en las que también escribió anotaciones y comentarios destinados al taller de litografía. Los bon à tirer son las impresiones que el artista acepta como buenas -de ahí la expresión francesa- para iniciar el tiraje definitivo de la edición. Se pueden reconocer porque Miró da su aprobación marcándolas con la anotación BAT, siglas de bon à tirer, seguida en ocasiones por la frase, más explícita: «(BAT) después de correcciones».